Cuánta más soledad no habrá
cuando cogemos un libro y nos aislamos de manera voluntaria del mundo para
introducirnos de lleno entre sus páginas, para leer con atención cada frase,
para vivir otra vida que sabemos nunca será igual a ninguna otra por mucho que
las palabras leídas sean las mismas. Cuando pensamos en alguien leyendo, hay
una percepción general del individuo en su aislamiento bebiéndose el alma de
una historia, ya sea con manta, chimenea y lluvia o bikini, toalla y sol. Está
allí, en su rincón sin paredes, creando una especie de barrera a su alrededor
que nadie en su sano juicio se atrevería a romper (pero ay, qué poco juicio hay
en el mundo).
Sé que es tentador, pero si molestáis a alguien así vuestra vida correrá serio peligro. (Fuente: pixabay) |
Existe sin embargo un deseo
persistente en el ser humano de compartir historias, ya sean reales o
ficticias, propias o ajenas. El lector no es alguien inmune a este hecho, y
busca (muchas veces sin hallar) con quien compartir las imágenes que ha vivido
en su mente (esto suena como si todos los lectores estuviéramos locos, y
probablemente así sea). No obstante a veces es difícil encontrar alguien con
quien poder comentar un mismo libro, y el lector se ve en muchas ocasiones
obligado a relegar sus impresiones a una carpeta de su memoria. No es que los
lectores no tengamos amigos lectores (algunos somos asociales, pero aquí no cabe generalización posible), pero nuestros gustos no tienen porqué
coincidir, o las lecturas que nos apetecen en cada momento no tienen por qué
ser las mismas.
Por supuesto, hay mucha gente
que tiene otras experiencias, pero la mía es esta: en mi adolescencia en mi
grupo de amigas (lo que no quiere decir que fueran todo chicas, pero eran mayoría)
muchas éramos lectoras y comentábamos Harry
Potter, Memorias de Idhún, Canción de Hielo y Fuego, Eragon… No coincidíamos en todas las
lecturas ni estas eran simultáneas (nos prestábamos libros y esas cosas
impensables que creen algunas leyes de propiedad intelectual), pero conforme
los íbamos leyendo íbamos intercambiando impresiones (y emociones, muchas
emociones). Esto convertía la solitaria lectura en un hecho social, en tema de
conversación y debate, en camisetas de dragones, unicornios y serpientes
aladas, en pendientes en forma de rayo, en anillos de serpientes enroscadas, en
vídeos cumpleañeros de dudosa cordura. Y llegó la universidad, el tirar cada
uno por un lado, el perder la rutina de la lectura (yo apenas llegaba a leer un
par de libros al año), el volver a la solitaria vida del lector.
Hace unas semanas Carlos
comentaba ese «agente
liberador» que supuso El señor de los
anillos cuando salió la película. A mí me ocurrió algo semejante cuando HBO
estrenó Juego de Tronos (aunque hace
dos temporadas que no la veo). Canción de
Hielo y Fuego es una saga que me ha unido a mucha gente desde que la
descubrí en 2006 (hace casi diez años ya). Sin embargo no ha sido hasta hace
poco, hasta que volví a coger con ganas la lectura con blog y redes sociales de
por medio, que volví a sentirme como cuando tenía quince años en el patio del
instituto. Por un lado, con las reseñas, con las que no pretendo hacer una
crítica sino compartir mis impresiones con todo aquel que quiera leerlas (y
debatirlas). Las puntuaciones no son para mí una medida de la calidad de la
novela (aunque influye, por supuesto), sino una medida de lo que han supuesto
para mí. Hay novelas que están escritas para ser entretenidas y no para ser el
próximo clásico literario y no tengo ningún problema con ello. Pero eso solo da
para disfrutar a medias. Al fin y al cabo, quien lee las reseñas no tiene por
qué haber leído el libro y a no ser que alguien me contacte por privado para
comentar, el intercambio se limita a un par de comentarios (cosa que agradezco
inmensamente porque eh, que te comenten una entrada mola y da gustirrinín, no
nos vamos a engañar).
Cuando lees también puedes montar homenajes tan chulos como el
|
No, lo que estoy disfrutando (mucho
más) son las lecturas conjuntas (las pocas en las que he participado). Aunque
he de reconocer que twitter resulta un poco agrio para este tipo de iniciativas
(por eso de los spoilers o el límite de caracteres), con la de Neverwhere lo pasé muy bien (también
influye el fantástico rato que pasé con Mangrii, Duxiet y Diego Marcapáginas en su canal hablando de la
novela), pero con Cartas de amor a
los muertos apenas tuve interacción con el resto de participantes (muy
pocos o poco habladores por lo que comprobé). Comentar en un grupo de whatsapp
también es una buena opción, aunque tampoco me gusta que mi número de teléfono
ande por ahí (que hay gente muy maja, pero nunca se sabe). En octubre voy a
probar en un grupo de goodreads y a ver cómo funciona.
¿Y por qué las estoy disfrutando
tanto? Porque nunca la lectura se había convertido en algo tan social (no,
tampoco he estado nunca en un club de lectura). Me resulta muy enriquecedor
obtener las visiones de otros lectores al tiempo que yo tengo las mías propias,
cómo cada uno ofrece diferentes interpretaciones, todas igual de válidas. Sus
impresiones se suman a las mías, adquiriendo mayor complejidad y posibilitando
una visión de la obra desde muchos más ángulos. «Pero eso se puede hacer a
posteriori», diréis. No de la misma manera. Muchas veces no caigo en algunos
detalles que otro sí, o al contrario, que pueden condicionar la manera en que
me llega una historia. Al acabarla, es posible que no lo recuerde (teniendo en
cuenta lo que puedo tardar en leer una novela, no es de extrañar), y esa
experiencia se perdería. Y aunque no hago tantas lecturas conjuntas como me
gustaría, es algo que recomendaría probar a cualquiera.
«Bueno, ¿y por qué nos cuentas
todo este rollo tuyo?», os estaréis preguntando. Pues en primer lugar porque me
apetece, porque me han gustado mucho las lecturas conjuntas en las que he
participado y como esto es más que veneno,
no todo van a ser quejas. También hay que hablar de las cosas que nos gustan y
nos parecen positivas. Y a mí me resulta enormemente positivo que gente que
apenas se conoce de nada se una durante unos días para leer una misma obra. Me
parece bonito y es algo que no está en el imaginario colectivo cuando pensamos
en una persona leyendo. Pensar en la lectura más allá de la individualidad y la
soledad es un punto más a favor de este hobby
que aún muchos reprueban y rechazan.
Y en segundo lugar porque para
#LeoAutorasOct se han organizado UN PORRÓN de lecturas conjuntas (en las que no
voy a poder participar en todas ni de coña por mucho que yo quiera). Y os las
voy a dejar por aquí por si queréis sumaros a alguna:
Alif el invisible, de G. Willow Wilson - Organizada por @sileny2 y @lornian. Comienza el 1 y acaba el 9, leyendo unas 50 páginas por día. Comentarios en twitter con #LCAlif. Es un libro que tengo muy muy pendiente y que me han recomendado mucho mucho y no sé si podré unirme o no. Pero ganas hay.
Crónicas de la Torre, de Laura Gallego - Organizada por @Stiby2 y @paulavelc8. Durará todo el mes e incluirá solo la trilogía original (si participáis y os gusta podéis dejar Fenris el elfo para noviembre). En twitter.
El castillo ambulante, de Diana Wynne Jones - Organizada por La Nave Invisible. Empieza el 1 de octubre y se dejará tiempo durante todo el mes para leer. Se comenta en un grupo de goodreads público por capítulos para evitar spoilers. También hay espacio para hablar de otros libros de la autora, de la película y del libro completo si lo habéis leído ya. Vamos, para que cuanta más gente participe, mejor. También hay HT para comentar en twitter (#LCNaveAmbulante).
Escamas, de Rachet Hartman - Organizada por Ana González Duque. Durará todo el mes y se podrá comentar tanto en twitter (#LCEscamas) como en su página de Facebook. Escamas es la segunda parte de la bilogía de Seraphina, editada por Nocturna.
La corte de los espejos, de Concha Perea - Organizada por @lornian y participación de servidora porque estaba en mi lista y lo voy a leer sí o sí en octubre. Empezamos el día 17 y acabamos el 30, a unas 50 páginas por día. De momento el HT es #LeoAutorasOct (que también habría que usarlo en las anteriores). También comentaremos por whatsapp.
Tengo entendido que The spoiler club dedicará su programa de octubre a Margaret Atwood y El cuento de la criada, pero actualizaré cuando lo sepa concretamente. Si alguien tiene alguna corrección o algo que aportar que no dude en comunicármelo y editaré la entrada.
¿Pensáis participar en alguna de
estas lecturas conjuntas? ¿Habéis participado en alguna?
Hola!
ResponderEliminarQué entrada más chula. Es verdad que desde que comento lecturas en internet se ha vuelto algo más social, siempre hay alguien que está leyendo/ ha leído/ quiere leer el mismo libro que tú. Yo sí que he participado en varias LC por twitter y la verdad es que es divertido.
Genial entrada recopilando tantas LC qué pasada que hayan surgido tantas para el #LeoAutorasOct :)))
Y seguro que ha surgido alguna otra y no me he enterado XD Hacía unas semanas que quería hablar de la lectura como un fenómeno social y he aprovechado la ocasión. Gracias por pasarte ^^
EliminarTambién me he apuntado a la iniciativa porque me parece muy interesante
ResponderEliminaraunque todavía no he decidido exactamente todo lo que voy a leer
un beesito
Coge lo que prefieras en cada momento, tampoco hace falta hacerse una lista obligatoria. Besos ^^
EliminarYo he estado en alguna LC y las experiencias que he vivido han sido maravillosas, sin duda es una forma muy bonita de unir a gente gracias a sentir una misma pasión: leer.
ResponderEliminarDe las iniciativas de las que hablas tenía pensado unirme a la del Castillo Ambulante (porque he visto la película y no se porqué no he leído el libro) y puede que me una también a la de la Corte de los Espejos porque últimamente las opiniones que he visto han hecho que esa novela me interese muchísimo. Perdóname por escribirte un comentario tan largo, ¡un saludo!
Tú escribe, escribe, que yo leo. No la biblia, pero no es un comentario largo :) La Corte lo tengo pendiente desde hace mucho, lo tenía en el reto de este año y no podía dejarlo pasar más. Me da miedo porque tengo mucho hype pero espero que no decepcione. Saludos ^^
EliminarHola :) A mi me encanta comentar las lecturas pero tengo el problema con las LC que se marcan periodos concretos o páginas concretas, realmente no sé funcionar así y me agria la lectura, lo intente una vez pero no lo disfrute. A mi me gustan las LC de libre albedrío, se da un mes y sé va comentando, vas viendo las opiniones del resto y comentando con ellos, en cualquier red social. Si que es verdad que cada vez proliferan más este tipo de actos, y que además ayudan a ver la lectura desde muchos ángulos, o incluso a fijarse en cosas que tu no te fijaste o sorprenderte con los puntos en que puedes coincidir con alguién. Viva las Lc. Viva los libros. Viva Twitter. Un abrazo^^
ResponderEliminarCuando hay X número de páginas o de capítulos por leer al día me suelo agobiar, porque generalmente voy más lenta, así que también prefiero que el tiempo sea holgado e ir a mi ritmo, pero por lo demás las disfruto mucho. A ver si te animas con alguna ^^ Besos!
EliminarPara mi abrir el blog me ayudo precisamente a eso, a poder compartir mis lecturas porque realmente en mi entorno no hay muchos lectores, y los que no son, no es que compartamos las mismas lecturas, así que aunque la lectura sea un acto solitario, compartir impresiones es lo que lo hace aún más enriquecedor. De las lecturas conjuntas propuestas me falta leer El castillo ambulante, así que veré si lo tienen en la biblioteca y me apunto (las otras las seguiré por Twitter, sobre todo la de La corte de los espejos que es un libro que me encanta)
ResponderEliminarBesos
Yo echaba mucho de menos hablar de libros y desde que abrí el blog he conocido a mucha gente genial, así que es una experiencia estupenda :)
EliminarSi puedes conseguirlo pásate, el grupo estará abierto todo el mes y como se comenta por capítulos no hay prisa ^^ Besos!