Replanteo la pregunta: ¿qué 12 ilustraciones/momentos/personajes elegiríais para el calendario CDHYF 2017? @Los7Reinos @WesterosToday :)— Enrique Corominas (@Corominas) January 29, 2016
Varios le contestamos y aunque
las propuestas no eran completamente idénticas (eso hubiera sido un auténtico
milagro), sí que coincidían en algunos puntos esenciales. Y yo me quedé
pensando, ya más pausadamente, cuáles serían las escenas que mejor retratarían
o resumirían la saga y sus personajes hasta ahora. Es complicado, y lo será aún
más cuando se publiquen los dos libros que quedan, pero una hace lo que puede.
Al final decidí escoger
distintos momentos protagonizados cada uno por personajes distintos, porque
creo que una de las maravillas de esta saga es que cada uno de ellos puede ser
protagonista y esencial en un instante en particular de la historia. Sería un
tanto injusto centrarnos solamente en unos pocos cuando tenemos unas novelas
plagadas de personajes memorables; llenos de grises, de ambiciones, secretos y
sentimientos que los hacen errar y, a veces (bastantes, en realidad), morir.
También he decidido centrarme en escenas que transcurren durante o en un tiempo
cercano a las novelas, porque si nos remontamos a los tiempos de Aegon el
Conquistador no habría manera de escoger.
No creo que sea necesario, pero
como quien avisa no es traidor, advierto que esta entrada está plagadita de spoilers de los libros. De los cinco que
hay publicados. Absteneos, infieles.
I. Arya, Jon y Aguja.
Quería empezar por algo suave.
Uno de esos momentos tiernos que te atenazan el corazón cuando has recorrido
mil páginas más y echas la vista atrás y aunque lo deseas, sabes que no se
repetirá.
Jon está a punto de marcharse al
Muro y Arya está rehaciendo su baúl para partir hacia Desembarco del Rey. Justo
antes de irse, Jon va a despedirse y le hace entrega de una espada muy
especial, hecha justamente para ella: pequeña y ligera, perfecta para una niña
de nueve años. Es un momento íntimo, lleno de complicidad entre ambos hermanos:
el bastardo que pertenece a medias a la familia y la niña que no quiere ser una
dama, ambos con el pelo y los ojos oscuros, rasgos típicos de un Stark. Aunque
la escena es emotiva en sí, adquiere un mayor significado conforme vamos
avanzando en la historia. Es la despedida de Jon de su familia, una familia con
la que muy difícilmente volverá a encontrarse y por la que tendrá numerosas
dudas en un futuro. Y al mismo tiempo, es el inicio de una serie de
acontecimientos: el incidente con Joffrey de camino a Desembarco; el
entrenamiento de Arya a cargo de Syrio Forel; la pérdida de Aguja cuando la
llevan a Harrenhal; su recuperación cuando mata a Polliver y Cosquillas junto
con Sandor Clegane; su incapacidad de olvidar quién es cuando entra al servicio
del Dios de Muchos Rostros, escondiendo a Aguja para que no se la quiten como
ocurre con el resto de sus pertenencias.
Aguja está íntimamente ligada a
la historia de Arya y una parte de nuestro corazón ansía que estos dos hermanos
vuelvan a unirse antes de morir.
Arya y Jon según Jenny Dolfen |
II. La muerte de Ned
Stark.
Es la escena contrapunto a la
anterior y la que marca claramente un cambio radical en el devenir de la historia.
Aunque el momento «las cosas que hago por amor» ya lo anuncia, la muerte de Ned
supone la certificación de que estamos ante una saga donde nadie está a salvo,
por muy principal, protagonista y querido que sea un personaje.
Martin nos muestra a través de
los ojos de Arya una escena en la que aún hay lugar para la esperanza, donde
Sansa sonríe, el Septon Supremo llama a la misericordia e incluso Cersei, una
de las más damnificadas por la «traición» de Eddard, acepta que éste vista el
negro. A pesar de la humillación por tener que declararse un traidor, a pesar
de las piedras que el público le tira cuando así lo anuncia, todavía hay un
hueco para creer que ahí acabará todo. Y entonces, por si acaso se nos había
pasado por alto la crueldad de Joffrey, decide pasar de todo el mundo y
decapitarlo con su propio mandoble, Hielo.
Sin duda es un momento clave en Canción. Sus consecuencias no se hacen
esperar: Robb es nombrado Rey en el Norte y clamará venganza por la muerte de
su padre, Sansa se queda sola en Desembarco a merced de Cersei y Joffrey y Arya
se ve obligada a huir y hacerse pasar por un chico para pasar desapercibida en
su camino hacia el Norte. Los Greyjoy también aprovecharán para rebelarse de
nuevo y Poniente tendrá guerra en casi todos los sitios posibles.
Se puede hablar mucho sobre la
violencia en Canción de Hielo y Fuego
y la cantidad de muertes que hay. Pero cuando hablamos de personajes
importantes, sus muertes no son gratuitas ni inútiles, sino que dan lugar a
grandes cambios que hacen que sigamos sorprendiéndonos.
Ilustración de Robert Ball |
III. La quema de los
Siete.
No se puede negar que la Mujer
Roja y su Señor de la Luz son de los elementos más intrigantes que encontramos en Canción y cuyos secretos aún siguen
ocultos tras todo lo que hay publicado (a falta de leerme El Mundo de Hielo y Fuego, que aún no he podido echarle el guante).
¿Qué pretende Melisandre? ¿ La magia de R'hllor (Rolón para los que no se
acuerden de cómo se escribe) es real? ¿Azor Ahai será real? ¿Por qué en un
principio es Stannis?
Preguntas, preguntas y más
preguntas es lo que hay alrededor de la sacerdotisa roja desde que aparece en
el prólogo de Choque de Reyes. Pero
es en esta escena donde por primera vez escuchamos el nombre de Azor Ahai, el
Guerrero de la Luz, aquel que sacará del fuego una espada llameante cuando la
oscuridad cubra el mundo. Stannis extrae una espada en llamas de la hoguera
formada con las figuras de los Siete en el patio de Rocadragón. Es el inicio de
una extraña alianza, que podemos comprender por la parte de Stannis pero no
llegamos a hacerlo del todo por parte de Melisandre. También es una escena
donde contemplamos el fervor religioso por parte de Selyse, la esposa de
Stannis; la frialdad de éste; el miedo de sus vasallos; la prudencia de Davos. En
unas pocas páginas descubrimos las características esenciales de unos
personajes que nos acompañarán durante los siguientes libros y también
asistimos a uno de los misterios más interesantes de la saga: R'hllor y el
poder del fuego y su sacerdotisa.
Melisandre quemando a los Siete en Rocadragón según Magali Villeneuve |
IV. El enfrentamiento
de Vado Rubí.
Aunque por entonces no se
llamaba así. Era un sitio cualquiera en el Tridente que cambió su nombre una
vez Robert Baratheon esparció los rubíes que cubrían la armadura de Rhaegar
Targaryen cuando la maza le impactó en el pecho.
No es un hecho que ocurra en sí
mismo en el tiempo en que se narra Canción de Hielo y Fuego, pero sí que es un
acontecimiento muy cercano, que se menciona en diversas ocasiones y que además
fue crucial a la hora de decantar la balanza a uno u otro lado en la Rebelión.
También se puede entender como la culminación de una historia digna de
telenovela de la que tenemos solo unos pequeños trozos y que ha dado lugar (y lo
sigue haciendo) a una (o varias) de las teorías más interesantes de esta saga.
Y por si fuera poco, creo que
todos tenemos en la mente un combate de proporciones épicas. ¿Quién no querría
tener incluso una secuencia de imágenes de este enfrentamiento?
Robert Baratheon vs Rhaegar Targaryen según Mike S. Miller |
V. La batalla del
Aguasnegras
En Choque de Reyes y tras perdernos la batalla del Bosque Susurrante,
ya que el PoV lo tiene Catelyn, todos teníamos ganas de llegar a la narración
de una buena batalla, y la del Aguasnegras no decepciona. Contada a través de
Davos, Sansa y Tyrion, Martin nos muestra desde muchos ángulos una lucha en la
que no tenemos muy claro quién queremos que sea el ganador. ¿Stannis, de modo
que Cersei, Joffrey y todos los pendejos de la Guardia Real pierdan la cabeza o
cuelguen de alguna muralla? ¿O Tyrion, que al fin y al cabo es uno de los
personajes más queridos, que se ha currado la defensa de Desembarco y que de
ninguna manera queremos ver muerto?
Davos nos hace sentir la tensión
previa a la batalla, busca trampas y evalúa los movimientos de la flota
Lannister. Tyrion intenta controlar la situación y llevar a sus hombres a la
victoria; él, que apenas es considerado un mediohombre y que acabará ganándose
el respeto con la victoria. Asistimos al miedo atroz que tiene el Perro al
fuego y que le hará renegar de todo y todos. Creo que es aquí también cuando
empezamos a ser conscientes de que Cersei no está del todo cuerda, además de su
notable devoción por el vino. Lo bueno que tienen estas situaciones extremas es
que nos ayudan a ver los instintos más primarios de los personajes: el miedo,
la locura, la lucha por sobrevivir.
En toda la saga, el hecho de
tener capítulos cortos con el punto de vista de un personaje en concreto ayuda
a mantener la atención del lector, pero me parece que en este tipo de escenas
además es una gran ayuda para tener diversas perspectivas. No sólo por saber
qué ocurre en distintos momentos y lugares de la lucha sino también porque nos
traslada una constante en estos libros: que no hay malos ni buenos, solo hay
personas con aspiraciones diferentes. Tyrion y Davos hacen lo que tienen que
hacer aunque luchen por bandos opuestos, y eso hace que el lector se implique
mucho más que si directamente tenemos personas buenas y malas.
Lo cierto es que es una batalla
muy emocionante y que ya tiene una ilustración que creo que transmite muy bien
el terror verde del fuego valyrio y el caos que supone un enfrentamiento así.
La batalla del Aguasnegras según Enrique Corominas |
VI. La batalla del
Puño de los Primeros Hombres
Así comienza Tormenta de
Espadas, con uno de los prólogos más espeluznantes de las cinco novelas. Los
capítulos que abren cada libro suelen estar dotados con un extra de magia y
misterio. En Juego de Tronos, la muerte de Ser Waymar Royce a manos de los
Otros. En Choque de Reyes, la muerte del maestre Cressen con su propio veneno,
destinado en un principio a Melisandre sin que a esta le haga ningún efecto. Y
en este tercer volumen, asistimos a los planes de deserción de unos cuantos
miembros de la Guardia de la Noche justo antes de que suene el cuerno una, dos
y tres veces.
—Tres —chilló, dirigiéndose a Chett—, han sido tres, he oído tres. No
han tocado tres nunca. Jamás, en miles y miles de años. Tres significa...
—Los Otros.
Muchas páginas tienen que pasar
para que lleguemos al relato de esta batalla, relatada por Sam, apenas un
atisbo de la lucha que se libró en el Puño. Los espectros atacaron, inmunes a
las armas excepto el fuego, y los hombres cayeron, levantándose de nuevo con un
fulgor azulado y frío. Más de dos tercios de los hermanos juramentados que se
hallaban allí perecieron y el resto huyeron mientras el ejército helado los
perseguía y los mataba uno a uno. Samwell, cansado y a punto de dejarse morir
sobre la nieve, recuerda los gritos y las órdenes de ataque y de retirada, de
terror y de muerte. Grenn y Paul el Pequeño intentan evitar que se quede quieto
sobre el manto blanco cuando son atacados por Otro. Sam hace notar ciertas
diferencias entre este y los espectros. El Otro mata a Paul y Sam lo atraviesa
casi por casualidad en la garganta con la daga de vidriagón que Jon había
encontrado antes de irse con Qhorin Mediamano en un fardo enterrado en la
nieve.
Lo mejor y lo peor de esta
narración es que es bastante sesgada, ya que Samwell no estaba en el fragor de
la batalla, sino al lado de los cuervos, así que oye más que ve y perdemos
mucha descripción. Pero por otro lado eso hace que el lector tenga que
imaginarlo todo, y muchas veces eso es bastante mejor que lo que podamos leer.
No obstante nadie hace ascos a una buena ilustración, sobre todo si puede ser
tan épica como la de este momento en el que la Guardia se ve mermada por
completo y superada por unas fuerzas para las que no estaba preparada para
enfrentarse.
La batalla del Puño de los Primeros Hombres según Kay Huang (zippo 514) |
¡Y esto es todo por hoy! Para leer la segunda parte podéis pinchar aquí. ¿Apuestas para ver qué escenas aparecen? Quizá ponga una encuesta al final, ¿os gustaría?
Gran selección de escenas (y preciosas imágenes), coincido contigo en la mayoría. Es que realmente es imposible quedarse con solo un puñado de la gran cantidad de momentos épicos de Canción (como el combate entre Oberyn y La Montaña) ^^
ResponderEliminar¡Nos leemos!
Es muy muy complicado. Al principio hice una lista enorme y tuve que ir reduciendo, claro. Me alegro de que te gusten ^^ ¡Besos!
EliminarHola :) Que interesante y la verdad que complicado, hay tantas miles de escenas que tienen vida en nuestras mentes como lectores de esta grandiosa saga. A mi me gustaría ver a Arya por la Casa de Blanco y Negro, ver la escena de Sam el mortífero, a Oberyn en plena acción contra la montaña, una Cersei con su paseo de la vergüenza, a Euron haciendo resonar su cuerno y alzarse, a Tyrion en el nido de águilas,...uf, creo que podría seguir toda la mañana, ya paro XD Espero votación en la siguiente entrada. Un besin^^
ResponderEliminarHabrá votación, a no ser que esto haga alguna cosa rara, que tampoco me extrañaría XD La verdad es que gracias a los calendarios tenemos muchas imágenes de gran calidad para babear a gusto. ¡Pero somos unos insaciables y siempre queremos más! Espero que te gusten las de la próxima tanda. Un saludo ^^
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